Marchitez bacteriana (Ralstonia solanacearum).

Marchitez bacteriana (Ralstonia solanacearum).


La distribución de esta enfermedad es a nivel mundial y principalmente se presenta en áreas tropicales y subtropicales. Es una de las principales limitantes en la producción de solanáceas, especialmente papa y tomate. Pérdidas de un 29% han sido reportadas en la producción de frutos frescos de híbridos de tomate.

Clasificación Taxonómica.

Reino:       Bacteria              Familia:    Burkholderiaceae
Filo:          Proteobacteria    Género:    Ralstonia
Orden:      Burholderiales    Especie:   solanacearum.

Síntomas.


Inician con la caída de las hojas basales, seguido de la marchitez total de la planta. Cuando el tallo se corta, este exuda un liquido gris gelatinoso al hacer un corte longitudinal en el tallo se aprecia una decoloración vascular.
La marchitez externa de la planta se hace evidente al bloquearse la absorción de agua. Las temperaturas de 29 a 35°C y los altos niveles de humedad en el suelo benefician el desarrollo de esta enfermedad. Puede sobrevivir en el suelo en donde infecta a las raíces, los insectos la pueden dispersar también en agua de riego o por el equipo de cultivo

Control.


  1. No existe una recomendación específica para el control de este patógeno, lo que se recomienda son medidas culturales y desinfección de los sustratos usados en almácigos, uso de semilla sana y certificada en campo y se puede aplicar Metan Sodio antes del trasplante.
  2.  El uso de semilla sana y la siembra en suelos libres del patógeno son los principales componentes para controlar y erradicar la marchitez bacteriana.
  3. Sin embargo, muchos son los factores adicionales que influyen en la incidencia de la bacteria tales como las condiciones ambientales (la temperatura y la humedad del suelo), la rotación con plantas no hospedantes, el uso de variedades menos susceptibles y de prácticas culturales (saneamiento y control de nematodos).
  4. Por lo tanto, sólo una estrategia de control integrado puede tener éxito para reducir la incidencia de la Marchitez Bacteriana, e incluso erradicarla.
  5. Esta estrategia es específica para cada lugar por lo que de los factores de controles existentes y disponibles, se deben seleccionar los que son factibles, apropiados y eficaces para una determinada localidad.
  6. Además, se deben tener en cuenta los factores sociales y económicos que influyen en las decisiones de los agricultores dentro del esquema de manejo.

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